No me acuerdo qué soñé, pero cuando estaba en la frontera (esa que divide el sueño del despertar, donde te revisan en la maleta que no te estés robando elementos oníricos como ‘recuerditos’) oí clarito la voz de mi mamá diciéndome un poema de Torres Bodet. No me acordaba de cuánto me gusta este poema… así que va, en plan de compartición, como souvenir prohibido de la tierra de los sueños.
Canción de la voces serenas
Se nos ha ido la tarde
en cantar una canción,
en perseguir una nube
y en deshojar una flor.
Se nos ha ido la noche
en decir una oración,
en hablar con una estrella
y en morir con una flor.
Y se nos irá la aurora
en volver a esa canción,
en perseguir otra nube
y en deshojar otra flor.
Y se nos irá la vida
sin sentir otro rumor
que el del agua de las horas
que se lleva el corazón…
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