Autor: Raquel

  • «Yo también estoy de vuelta»

    Y qué les puedo decir… Cuernavaca sigue donde la dejaron y se sigue viendo como se quedó (mentira, no puedo certificarlo: ¡yo nunca había ido a Cuernavaca!)

    Estuvo cool el bisne. Visitamos un bosque que se parecía al del Señor de los Anillos. Llovió. La lluvia hizo salir de la tierruca a unos animales maravillosos, como caracoles sin concha, como body snatchers sin presupuesto de producción, coomo gusanos de maguey tamaño familiar: babosas. Y son de colorines, jeje. Lo chistoso es que desde el momento en que supe que eran babosas, me quedé pensando -como autista de cine-: ‘mira una mariposa-hay que gente tan babosa’.

    No importa, no es el highlight del viaje. :)

    Platicamos un rato con Socorro Venegas y un par más de escribidores de por esos lares. Contra mi miedo ancestral a las reuniones de escritores (colada yo, como siempre, pues no pertenezco al gremio aquel), estos fueron simpáticos, divertidos, platicones y cotorros. Además, nos despedimos de ellos temprano :D Bailamos. Tenía un buen que no bailaba rolas de Selena (y ahora que lo pienso, esta vez no bailamos rolas de Selena, pero casi).

    Paseamos. Trabajamos. Y en la noche, vimos Cats en la tele.

    El domingo, grata sorpresa: cambio de horario. Eso me gusta, vuelvo a ser yo luego de tantos meses de ser zombi (pretextos, siempre pretextos).

    Pero se acabó el fin de semana. Hoy toca -espanto- la planeación de un tema bien acá: «Discriminación y SIDA». Estaba revisando mi cuaderno de temas y descubrí la causa de mi pila baja. Chequen nomás:

    • Sida y discriminación
    • Cómo superar un evento violento (asesinato de un ser querido, violación, robo, rapto, atentado terrorista, etc)
    • Embaracé a mi chava
    • Tratamientos de infecciones de transmisión sexual (punto de vista médico y emocional)
    • Cambios en los y las adolescentes
    • Consecuencias de la mala alimentación (desnutrición infantil, causa importante de muerte en Mx)
    • Afecciones de la piel
    • Mitos de la sexualidad femenina
    • Lo que separa a la pareja
    • Cómo enfrentar la discapacidad de mi hijoDe esa pequeña muestra, vemos que excepto dos, los temas son gruesos o tienden a serlo a la hora de los testimonios. Fui, muy enojada, a preguntar por qué no me tocan los temas simpatiquillos ‘cómo besar en seis lecciones’, ‘ahorro y pareja’, ‘hidroponia’, ‘darketos y punketos’…

      y me salen con que Paco y Sylvia, mis conductores, son los conductores para ‘temas delicados’, por lo que se les armó un equipo de gente ‘especialmente sutil y preparada para abordar estos temas’ entre los que se incluye… pus yo.

      Ora resulta que soy parte de un grupo de élite, nomás que en vez de metralletas, llevamos temas deprimentes. Y en otras palabras, ya me puedo ir olvidando de los temas light…

      ***

      Señor Aroche: el viernes me quedé dormida -ya estoy vieja. Todavía a la tarde cuando hablé con Gerardo, tenía planes de caerles en el desmother :(

      ***

      Señoritas bruncheras del mundo: espero que esta semana nos vaya mejor :)

      ***

      Cyn: gracias por la empatía, esperemos que la próxima semana nos vaya mucho mejor

      ***

      Y como dijo el pequeño Tim: ‘¡Feliz navidad a todos!’

  • Paseo…

    • Nos vamos a Cuerna. No es exactamente un paseo, pero servirá…
    • Ayer extrañamos a la dueña de El aljibe. Esperemos que la próxima semana tengamos más suerte :)
    • Viene semana movidita. ¿Ya saben del festival de cultura británica en Plaza Loreto?
    • Creo que, después de todo, el sitio de Fran quedó lindo. Acaso hay que arreglar algo en los comentarios. Pero para ser mi primer enfrentamiento con Dreamweaver (claro, la plantilla original era casi lo mismo, jeje, y terminé corrigiendo casi todo directo en el código fuente), me parece que está muy bien.
    • No había visitado el sitio de Edgar Chinaski. Está lindo y comentó de una peli que no he visto (y que quiero ver, sniff).
  • PD 3

    Que conste que sí avisé que lo de Fran será ‘pronto’. Todavía no terminamos de poner a punto el sitio, así que si visitan ahorita, verán una casa en obra negra.

    Advertido está.

    Me voy a desayunar con las chicas del club

  • Oops

    Releo mi post. espero que no se haya entendido que estoy en contra de la autocompasión o que, como hay personas con más problemas que nosotros, nuestros problemas no sean importantes.

    Creo que cada quién tiene sus tragedias, y que el tamaño de ellas no se mide con respecto a las tragedias de los demás, sino con respecto al impacto que causan en nuestras almitas.

    Creo que un niño tiene derecho a sentir que se le acaba el mundo si se muere su ratón o su pescado, pese a la cantidad de animales que matamos cada año como parte de nuestro ‘avance industrial’.

    Es sólo que… no sé… creo que mis dolores no eran tan grandes ayer, y pude verlos con otra mirada. La de mi ombligo, tal vez. :)

    Pero también creo que sentir con los demás (compartir sus alegrías, pero sobre todo, sus dolores) es importante. Y nos permite ser más humanos, digo yo. Pero qué puedo decir, si soy un alien.

    Mando abrazos y besos a todos.

    PD. Prometo que pronto verán cosas hermosas en el sitio de Fran. Uno de los mejores amigos, de los más inteligentes, sensibles y (por qué no decirlo?) azotados.

    Junto con la maestra Mergruen, joyas que conocí en un pasado que desapareció (pro ellos existen, tal vez para recordarme que fue real y no un sueño)…

    PD2: Fran: ya no puedes echarte para atrás: si no posteas cosas hermosas, inteligentes, sensibles y azotadas, quedaré mal en este blog :D

  • Remedio mágico contra la autocompasión

    Sí, la verdad es que todavía hoy en la mañana seguía bastante chípil y no me atraía mucho que digamos la idea de sentirme mejor. Pero hay cosas que obligan, caray. Por ejemplo, cuando todo te sale bien, y cada cosa buena te tapa la boca y te impide seguir de quejinche.

    O, por ejemplo… lo de hoy.

    Llegué al canal en plan ‘qué hueva la rutina’ porque me tocó sustituir a otra guionista. Me dieron el guión y ni lo miré (‘total, no será más difícil que los otros’). Y de pronto, llega uno de los invitados del día. Carajo. Un hombre como cualquier otro por estos lares (moreno, vestido con limpieza, sin lujo, pues). Lo que lo hacía diferente a los demás hombres que andaban por ahí, era que cargaba a una nena de unos dos años. Peloncilla. Ojos grandes y ojerosos. Carita de tristeza.

    Corrí a ver mi guión. ¡Puta madre! ‘Cáncer en niños’. Y ahí tienen el foro lleno de chavitines que tienen algún cáncer o que van saliendo de la enfermedad. Y yo con mi autocompasión de vidrio… no, pues nos escondimos en el baño. Pero había que trabajar, así que la dejé ahí y salí de nuevo y estuve en la cabina.

    Qué valor el de una chavita de diez años, venida de no sé dónde lejos del DF, que cuenta cómo le partió la madre la quimio (así, con esa palabra lo dice), pero qué contenta está ahora de volver a la escuela y a jugar…

    Qué huevos de algunos padres y madres que cambian todo lo que les era conocido por un sillón de hospital…

    Y claro, me acordé de Cliff. La chavitina de 2 años tiene lo mismo que él. La diferencia, cruel, es que ella está lista para el transplante de médula y ya tiene un donador! Lo que no tiene es la lana que hace falta para la cirugía (MILLÓN Y MEDIO DE PESOS!!!). Y los papás la cargan como si fuera una flor lánguida, una figurita de cristal soplado, una burbuja de jabón. Pobres. La niña no aguanta otra recaída. Me imagino que ver cómo se marchita poco a poco un hijo debe ser una verdadera chingadera.

    Ufff.

    Pero también había gente que salió del cáncer. Como la niña de 10 años, como un par de casi-adultos, que se acuerdan de la leucemia y los tumores pero que eligen dejarlos atrás.

    Y hay gente que merece aún más mi admiración: los risoterapeutas que estuvieron en el programa. Se disfrazan de médicos-payasos y van a los hospitales y hacen reír a los niños y niñas enfermos. Lo más conmovedor es ver la cara de papás y mamás al ver reír a su hijo o hija después de sabe Dios cuántos días o meses de estrés y depre…

    Bueno. Decidí que donaré aunque sea poquito dinero para la operación de Denisse (la nena de dos años). Y que en cuanto pueda tomaré el curso de risoterapia.

    Dos momentos clave:

    Cuando una persona se comunicó para agradecer al doctor Romanok, uno de los payasoterapeutas, porque estuvo presente en las últimas horas de vida de un niño, y murió sin miedo, con una sonrisa.

    Dos, cuando uno de los payasillos dijo «No nos podemos sentir completos como personas mientras no ayudemos a alguien más».

    Si alguien más quiere apoyar para este transplante, con lo que sea, la cuenta es: 4001987459, en Santander Serfín, sucursal Plaza Atizapán (a nombre de Denisse Tlatoa Arroyo).

    Si alguien quiere saber qué pedo con la risoterapia, visite este link.

    En todo caso, de momento me sigo sintiendo triste, y no es para menos, creo. Pero no puedo volver al mood de la autocompasión…

    Saludos a todos