Diez revistas de las que he sido adepta
Antecedentes, je.
Ayer propuse este juego para todo el mes. Y hoy en la mañana, Alberto hizo de ManoSanta y sacó el papelito para la primera lista. Como habíamos dicho, la escribí en el cuaderno y me dispuse a subirla al blog… Pero como las cosas fáciles son aburridas, entonces pasaron varias cosas: primero, me equivoqué y lo subí a una versión de mi blog que ya no uso (acá). Luego, lo subí al que sí… y nomás no hubo forma de que se publicara. Llegué a la oficina para intentarlo… y nisiquiera está como borrador, bu. Así que ahí voy de nuevo, qué caray (eso es lo bueno de haberlo escrito primero en el cuaderno, ¿verdad?).
Así que el papelito fue «diez revistas a las que he sido adepta». Al principio no tuve bronca con la brevedad, pero hacia la mitad me moría de ganas de echar todo el rollo de qué, cómo, cuándo y por qué. Creo que eso refuerza la hipótesis de que las listas ayudan a escribir. Ya me contarán ustedes cómo les va, si es que se animan al juego. Y ahora sí, sin más dilación…
Las diez revistas (que son trece, ups).
- Barbie. Por el fotocuento.
- Tú. En casa de mis primas. Traía calcomanías.
- Eres. Mi mamá me la compraba, desde la segunda que salió -¿para hacerme “más normal”?- y al principio me caía gorda, pero me enganché a los tests.
- Año Cero. En mi periodo cuchicuchesco.
- Chispa. Por su cómic. Me acuerdo de uno sobre un caballito de mar.
- Aposento Alto. Era, después de la Biblia, la lectura favorita de mi abuela. Y ahí me publicaron por primera vez. ¡Me pagaron!
- Selecciones del Reader’s Digest. Estuve suscrita varios años. Empezaba leyendo los chistes.
- Real Simple. Mi favorita actual, desde hace ¿15 años?.
- TVyNovelas. Nomás en la fila del súper)
- TeleGuía. Sobre todo por la columna de Chucha Lechuga y los horóscopos.
- Pilón: Notitas musicales, MAD y el Videorrisa.
Epílogo. Curiosamente, esta versión difiere de la que alcancé a publicar en mi otro blog. No en la lista en sí, sino en la redacción. Qué curioso funciona el autocorrector interno, ¿no?
Tons… ¿se animan a jugar?
Deja un comentario