Sobrenaturales, primigenios, macabros y misteriosos son los horóscopos de esta semana. Todo porque el libro base para el juego fue Los mitos de Cthulhu, de H.P. Lovecraft, obra indispensable si les gusta el terror (y si no, de todos modos deberían echarle un ojo). Vamos sin más dilación:
Aries: En su casa de R’lyeh el ausente Cthulhu aguarda soñando.
Tauro: ¿Quién conoce el fin? Lo que ha emergido puede hundirse y lo que se ha hundido puede emerger.
Géminis: La gente dice innumerables cosas de nosotros. Usted sabe algo, por las preguntas que hace…
Cáncer: Están pronunciando el conjuro.
Leo: Ygnaiih… ygnaiih… thflthkh’ngha… Yog-Sothoth
(¿Qué clase de horóscopo es ese? Por esta ocasión, haremos un segundo horóscopo de Leo -para aquellos que no sabemos leer en lenguas primigenias del espacio exterior)
Leo (2): El demoníaco monstruo ha desaparecido para siempre.
Virgo: No está muerto lo que yace perpetuamente. Y con el transcurso de los evos, incluso la muerte puede fenecer.
Libra: Nunca estuve en ese sitio ni tengo deseos de ir, pero supongo que visitarlo con la luz del día no supone ningún riesgo…
Escorpión: Yo creo que esla boca del averno.
Sagitario: Por Dios que no sé qué quiere mi hijo ni qué se propone.
Capricornio: Aún están por llegar.
Acuario: Eso fue sólo el principio, señores.
Piscis: Ahora empieza a ver con nitidez, ¿no?
